Al caer el último out de la temporada anterior para Navegantes del Magallanes, la balanza de posibilidades de volver a ver a Eduardo Pérez como mánager del equipo se inclinaba más a un “no” que a un “sí”. Y no por razones deportivas.
Con el zuliano al mando, el Buque volvió a la postemporada luego de su peor campaña en décadas. El alto mando filibustero quedó satisfecho con su trabajo. Pero personales atentaban contra la probabilidad de que repitiera como piloto.
Héctor Arias, presidente del navío, y Federico Rojas, nuevo gerente deportivo, hicieron la gestión. Se reunieron con el coach de Grandes Ligas de los Bravos de Atlanta para dejarle saber que él era el más indicado para llevar las riendas del proyecto. Y le convencieron.
“Estoy tan sorprendido como contento por ver el entusiasmo que se está viviendo acá. Como mánager, eso es lo mejor que puedes desear. Creo que Federico hizo un trabajo espectacular en tapar algunos huecos que tuvimos la temporada pasada”, dijo Eduardo Pérez a LVBP.com el sábado, tras dirigir su primera práctica de pretemporada. “Es bueno tener una relación así con el gerente, donde ambos podamos intercambiar ideas constantemente. Hablamos todos los días y nos vimos mucho también, porque él vive en Atlanta y fue a muchos juegos (de los Bravos). Estoy ansioso de que comience la temporada ya”.
Receso movido
Luego de que Rojas asumió la gerencia deportiva en marzo, Magallanes hizo tres cambios. Entregó a 15 jugadores, nueve de ellos lanzadores: Edwar Colina, Eduard Bazardo, Wilfred Alvarado, Kervin Castro, Deolis Guerra, Franklin Gómez, Jhan Zambrano, Brayan Palencia y Jesús Tillero; un receptor, Arturo Nieto; tres infielders, José Peraza, Ángelo Castellano y Aeverson Arteaga; y dos jardineros, Víctor Arias y el histórico Alberth Martínez.
“Salimos de peloteros insignia de este equipo, pero para conseguir cosas buenas, también hay que dar”, analizó Eduardo Pérez. “Alberth Martínez nos ayudó mucho la temporada pasada, pero conseguimos peloteros que también conocen muy bien esta liga y creo que van a ser importantes”.
En total, fueron 10 las piezas que recibió la Carabela. Cuatro son pitchers, José Suárez, Inmer Lobo, Ángel Bastardo y Jefferson Medina; un cátcher, Sandy León; tres jugadores de cuadro, Luis Sardiñas, Thairo Estrada y Rougned Odor; además de dos jardineros, Ángel Reyes y José David Pirela.
“Luché mucho para que trajeran a Sandy. Fue mi receptor cuando quedé campeón con Tigres de Aragua (en la 2015-2016) y este año ayudó en Atlanta a nuestro cátcher Drake Baldwin. Él va a aportar, juegue o no juegue”, precisó Eduardo Pérez sobre el grandeliga León. “Reyes va a proteger a nuestro MVP Renato Núñez, porque sabemos que los lanzadores van a intentar ajustarse a él. En general, los que llegaron y ya están con el equipo, o han confirmado su participación, son jugadores probados en esta liga”.
Atención al futuro y relevo
Aunque la estructura del Magallanes está muy clara para el Día Inaugural, el timonel, de 57 años de edad, quiere observar de cerca a la sangre joven que no pudo ver la zafra anterior.
“El equipo está casi hecho, pero a la vez hay muchos muchachos que quisiera ver. No olvidemos lo que hizo Luis Suisbel, que apareció el año pasado de la nada, cuando nadie sabía quién era él”, recordó Eduardo Pérez. “Hay muchos chamos de Ligas Menores que pueden hacer el trabajo en Venezuela. Es importante analizarlos, porque son nuestro plan B ante cualquier situación”.
En el bullpen, entretanto, contará desde el inicio, entre otras figuras, con Wilking Rodríguez, Anthony Vizcaya, Enderson Franco y Felipe Rivero, cada uno de ellos con experiencia como cerradores.
“No me gusta contar los pollitos antes de nacer, pero sí, me siento muy contento por el bullpen que tenemos. No me gusta adelantarme a la temporada. Siento que tenemos brazos que nos van a ayudar y se van a reemplazar después por otros más que ya están en la planificación”, explicó Eduardo Pérez. ”Tendremos algunos con restricciones y por tiempo limitado, pero ya tendremos a otros listos para ocupar esos lugares”.
¿Más robos?
Magallanes fue último en bases robadas el certamen anterior, apenas con 17, la menor cantidad del club desde que en la 2018-2019 se estafó 15.
En la temporada 2015-2016, que le llevó a su hasta ahora único título como mánager en la LVBP, los Tigres de Eduardo Pérez se estafaron 39 almohadillas, la tercera mayor cantidad del circuito.
Para el Opening Day, los bucaneros sólo contarán en lineup proyectado con el jardinero Mike Antico, quien viene de escamotearse 21 cojines en Triple A, entre los jugadores con ese perfil dinámico entre las bases. Aunque tendrán disponible también a José Córdoba (12 BR entre Rookie y Clase A avanzada en el año), y para el 25 de octubre esperan la incorporación de Nelson Rada (54 BR entre Doble A y Triple A).
“Espero poder hacer algo distinto este año, pero hay que acomodarse con lo que se tiene. Si tienes corredores, vas a correr, pero si tienes poder, entonces vas a esperar los batazos”, indicó el capataz. “Me gusta ser agresivo entre las bases, pero dependerá del equipo que se tenga. Y hasta el momento, tengo un equipo que, en su gran mayoría, pueden cambiar el transcurso del juego con un buen swing. Eso es muy bueno de tener también”.
Con información de LVBP
