Rusia atacó esta madrugada Ucrania con 476 drones y 48 misiles de distintos tipos que causaron daños en instalaciones energéticas y otras infraestructuras civiles en una decena de regiones y mataron a diez civiles en la región de Ternópil del oeste de Ucrania, según informaron el presidente Volodímir Zelenski, la Fuerza Aérea ucraniana y el Ministerio del Interior.
Según la Fuerza Aérea, sus defensas interceptaron 442 drones y 41 de los misiles lanzados por Rusia en el bombardeo.
El presidente ucraniano explicó que el ataque ruso alcanzó en Ternópil un edificio de viviendas en el que además de morir diez personas resultaron heridos decenas de civiles.
Zelenski hizo también referencia a las consecuencias del bombardeo para la ciudad de Járkov, en Ucrania nororiental, donde sufrieron daños infraestructuras energéticas y de transporte.
También fueron alcanzadas infraestructuras energéticas en las regiones de Ivano-Frankivsk, donde resultaron heridas tres personas, y Leópolis. Ambas están situadas en el oeste de Ucrania.
Zelenski afirmó que este nuevo ataque ruso demuestra que «la presión sobre Rusia no es suficiente», y pidió más sanciones al Kremlin y ayuda adicional a Ucrania para protegerse de los bombardeos enemigos. EFE












